Tras años de lucha y negociación, el Consejo Regional Indígena del Cauca celebra un importante paso hacia la autodeterminación en materia de salud con la cercana implementación del decreto que establece un sistema de salud para las comunidades indígenas.
Por Angie Castillo El Nuevo Liberal
Con 59 artículos y 9 títulos, este decreto representa un hito significativo en el camino hacia la garantía de la durabilidad y la inclusión de estas comunidades en el sistema de salud propio.
El proceso de elaboración de este decreto ha sido un ejemplo de participación activa y liderazgo comunitario, desviándose de modelos de salud que no tienen en cuenta las necesidades culturales específicas de las comunidades indígenas. En lugar de ello, propone un enfoque culturalmente adecuado para abordar las complejidades de la salud en estos contextos.
Este logro es fruto del esfuerzo conjunto y la determinación del movimiento indígena, que ha asumido la responsabilidad técnica, política, jurídica y financiera de este sistema de salud propio intercultural. A pesar de contar con el respaldo de los Ministerios de Salud y del Interior, aún quedan trámites administrativos pendientes para su completa implementación.
El Ministerio del Interior ha informado que el proceso está en marcha y que la firma final corresponderá al presidente de la república, Gustavo Petro. Una vez que se concrete esta firma, se dará inicio a un período de uno o dos años para la implementación gradual del sistema.
Durante este tiempo, se trazará una hoja de ruta detallada para garantizar la adaptación de las estructuras y capacidades técnicas, políticas y jurídicas en los territorios indígenas. Esto facilitará una transición fluida hacia el sistema de salud indígena, asegurando su eficacia y sostenibilidad a largo plazo.
El decreto representa un paso crucial hacia la autonomía y el fortalecimiento de las comunidades indígenas en el ámbito de la salud intercultural. Sin embargo, su éxito final dependerá de los procesos de reglamentación y adaptación que se llevarán a cabo en los territorios, demostrando así un compromiso genuino con la participación y la autogestión desde la base de la sociedad.
