Por Jorge Enrique Cubillos Caicedo (*)
El presidente Petro sabe que la única manera de llegar y sobrepasar incólume el 7 de agosto de 2026, es sembrando discordia entre hermanos. Sabe que están las pruebas y sobrepasó los topes electorales en su candidatura y elección a la presidencia; que desgraciadamente después de las benevolencias con Santos, Zuluaga (Odebrecht) y Duque (el Neñe Hernández), ahora la ley si sanciona y recae la responsabilidad sobre el candidato. Retrospectivamente López y Belisario, Samper y Pastrana quienes recibieron dineros del narcotráfico pasaron de agache. La izquierda y sus barras ven inaudito eso.
Dicha estrategia la aplica bien. Acorrala y denuncia reiterativamente a la oligarquía y al establecimiento porque no le aprueban las reformas tal y como él las quiere, a pesar de que con sus áulicos del partido liberal, conservador, de la U y etc, van andando y siguen adelante. Replica y reitera lo del golpe blando, a sabiendas de que eso en la Comisión Legal de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes terminará como lo de Heyne Mogollón y el proceso contra Ernesto Samper. Por algo el remoquete “Cámara de Absolución”. Entre dilación y dilación nada va a pasar.
Sabe que lo del tal “Poder constituyente” es un engaña bobos y que tiene a raimundo y todo el mundo opinando sobre algo que no tiene sino dos opciones: 1) surtiendo el trámite vía Congreso. 2) provocando una ruptura institucional. Sabe que las cortes por lo general (excepto unos íntegros) siempre han sido alcahuetas del infringir la Normas de normas. En la época más recientes así pasó con lo de Barco y Gaviria para implementar la Constitución del 91, y con lo Santos para implementar el tal Acuerdo de La Habana – Teatro Colón (a plebiscito no lo mata una compinchería del Congreso).
Ah, le llega como anillo al dedo la situación de Israel y el conflicto con Hamás en la franja de Gaza. ¡Qué vaina! Debe estar pensando. ¡Cómo fue no rompí relaciones antes! Ahora último se le adelantó Bolivia y Belice en el continente americano (antes ya lo había hecho Venezuela). Ha roto relaciones diplomáticas con el país cuna de la civilización judeo-cristiana. Con el país cuna de los ancestros y padres de los redentores de la clase obrera Karl Marx y Federico Engels. Donde está enterrado Abraham padre de los judíos y musulmanes. Desafortunadamente ese es un conflicto entre parentela.
Así como alguna vez Petro vio a Pizarro, Navarro y Patiño como jefes faltos de agudeza y berraquera en momentos históricos, ahora debe estar interiormente desesperado por ver la inacción de los BENEFICIADOS DE SU FAMOSA PAZ TOTAL (ELN, las disidencias de las Farc -EMC; Segunda Marquetalia-, Clan del Golfo, Autodefensa de la Sierra), las primeras líneas, las guardias indígenas, las guardias campesinas, las guardias cimarronas, que no salen a manifestarse junto a los obreros, campesinos, estudiantes, soldados y policías (en éstos últimos hay allí grupos rebeldes al alto mando
enquistados y que permanecen clandestinamente organizados). Es la chispa que puede incendiar la pradera. Ávidas están las bases (cabildos abiertos en todos los municipios) de ESTREMECER esto, para que los ESTALLIDOS de 2019 y 2021 vengan a ser un juego de niños. El ala izquierdosa tampoco no la tienen fácil. O se unen a la propuesta de partido único en cabeza de Petro o recuerden lo que le pasó a Trotsky. Así aglutinó Chávez a toditos en el PSUV. Proverbios 6. 15 – 19 dice: “Seis cosas aborrece Jehová, y aún siete abomina su alma; los ojos altivos, la lengua mentirosa, las manos derramadoras de sangre inocente, el corazón que maquina pensamientos inicuos, los pies presurosos para correr al mal, el testigo falso que habla mentiras y el que siembra discordia entre hermanos”.
(*) Magíster en Estudios Políticos, Universidad Javeriana. cubilloscaicedo@hotmail.com @CubillosJorge Mayo 2 de 2024.
