La pronta acción de la guardia ancestral y la comunidad para liberar a las víctimas y garantizar su seguridad es un ejemplo de resistencia y fortaleza comunitaria. Sin embargo, el incidente pone de manifiesto la necesidad de que el Estado colombiano tome medidas efectivas para proteger a las comunidades indígenas y garantizar la seguridad y los derechos humanos en sus territorios.
Por Redacción El Nuevo Liberal
El resguardo Indígena Paniquità del municipio de Totoró, en el oriente del departamento de Cauca, informó que seis comuneros indígenas, incluidos dos menores de edad, fueron secuestrados por hombres armados. Sin embargo, gracias a la pronta acción de la guardia ancestral y la comunidad, las víctimas fueron liberadas y se encuentran en buen estado de salud.
Los indígenas fueron sacados de sus hogares en la vereda Bellavista y trasladados hacia un lugar desconocido por los secuestradores. Sin embargo, las autoridades tradicionales y la guardia ancestral realizaron un procedimiento de rescate para liberar a los indígenas. El coordinador de Derechos Humanos del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), Hember Cucuñame, señaló que este rescate fue realizado dentro del marco de la Jurisdicción Especial Indígena y fue coordinado por las autoridades indígenas.
Ante este incidente, las autoridades ancestrales exigieron a los grupos armados cesar este tipo de acciones en los territorios indígenas y también instaron al Estado colombiano a defender los derechos de las comunidades étnicas. Además, solicitaron la intervención de organismos internacionales y de la Defensoría del Pueblo para tomar medidas urgentes en la protección de la vida de los pueblos étnicos.
La zona donde ocurrió el secuestro cuenta con una amplia presencia de estructuras del Estado Mayor Central de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y del ELN (Ejército de Liberación Nacional).
