Por: Álvaro Jesús Urbano Rojas
Casi cinco mil trabajadores quedarán cesantes en el departamento del Cauca por el reajuste de operaciones comerciales del Ingenio La Cabaña y la Productora de Papel S.A. -Propal-, a raíz de la invasión violenta de predios a los innumerables bloqueos a la vía Panamericana, a la pérdida de la confianza inversionista y la ausencia de cohesión social.
Del 1.124.317 la personas en edad de trabajar, solo 623.323 están empleadas en el Cauca. Las personas económicamente activas representan el 54.9%, la mayoría en la informalidad o con emprendimientos propios. El Cauca tiene 6,2 veces más demanda de empleo que ofertas laborales. Solo en 2022 se generaron 4.000 ofertas de empleo profesional y hubo cerca de 24 mil graduados en educación superior.
Según el nivel de formación, los graduados con estudios de posgrado (especializaciones, maestrías y doctorados) son los que menos ofertas laborales en Popayán y el Cauca. La mayor oferta es para los graduados con formación tecnológica, quienes encuentran oportunidades laborales, pero la escala salarial promedio no supera el salario mínimo 350 dólares al mes.
Los trabajadores las generaciones Millenials y Z (12 hasta los 42 años) son nativos digitales, buscan horarios flexibles, desarrollar sus habilidades, ascender, tener un rol de liderazgo, viajar, no consolidar familias ni tener hijos y encontrar retos laborales independientes. A diferencia de los de la generación Z (de los 42 hasta los 62 años), quienes tienen como prioridad lograr ingresos para consolidar su familia, tener estabilidad laboral y alcanzar una pensión de jubilación.
La mayoría de empresas registradas ante la Cámara de Comercio del Cauca, son microempresas, es decir, establecimientos cuyo número de trabajadores no supera los 10 empleados. En términos generales el departamento del Cauca se caracteriza por tener una economía volátil, baja industrialización, altos niveles de desempleo, pobreza, concentración del ingreso, bajos ingresos per cápita, y adicionalmente, su economía está permeada profundamente por el conflicto armado, el narcotráfico y la corrupción.
El departamento del Cauca ha mostrado en su historia reciente que su economía depende básicamente de cuatro sectores:
El industrial, en el norte del Cauca, contrata en el departamento personal para ocupar cargos bajos y medios, el personal de la alta dirección, pertenecen a trabajadores de otras latitudes.
El sector Comercial y de servicios muestra dificultades frente al empleo, ya que las entidades públicas y privadas, contratan por medio de recomendaciones y por vinculaciones inestables de prestación de servicios, las universidades públicas están en crisis y cada vez demandan menos empleos fijos, el sector salud también enfrenta una de sus peores crisis y los servicios domésticos no necesitan de altas cualificaciones.
La situación de desempleo de las mujeres es crítica. El indicador por género sobre desempleo muestra que, a nivel local las mujeres están liderando las cifras más elevadas. Es decir, la poca demanda existente es copada generalmente por hombres.
Son insuficientes los esfuerzos por potenciar sectores como el turístico, un sector que al operar en red requiere voluntad política para impedir el taponamiento permanente de la vía Panamericana, así como aumentar la inversión en carreteras, hospitales, infraestructura propia y apoyo político, entre otros, siendo los recursos geográficos y la cualificación de mano de obra los únicos factores con que cuenta específicamente el departamento.
El sector agrícola, lechero y ganadero, están impactados por el abandono del Estado en ausencia y fomento de redes de distribución y mercados internos para que el campesino tenga mejor poder de negociación y, por ende, se procuren mejores ingresos; requiere de manera urgente, implementar subsidios en el corto y mediano plazo para protegerlos de la inestabilidad de los precios en los mercados internacionales para alcanzar mayor competitividad. Un sector afectado por la proliferación de los cultivos ilícitos, a pesar de que el subsector cafetero genera alrededor de 50.000 empleos, cuya participación es baja dentro del total de la población económicamente activa del Cauca;
El sector educativo podría ser el protagonista pues cuenta con la infraestructura apropiada, pero que reclama ajustes estructurales en su perfil profesional y técnico para consolidarlo, lo que implica un estudio de pertinencia de sus planes de aula y programas certificado en alta calidad para formar por competencias laborales de alta pertinencia, con el propósito de generar liderazgos efectivos para orientar el desarrollo regional.
