Por: Jesús Alberto Aguilar Guerrero.
El departamento de Cauca, ocupa un lugar importante dentro de la historia de Colombia y todo redunda desde que Sebastián Moyano o de Belalcazar, fundo a Popayán, hace 487 años, el sábado 13 de enero de 1537, día de la Asunción, al amparo de Nuestra Señora del Reposo, convirtiéndose en un verdadero manantial de la cultura y una gesta de la historia nacional, transformándose en el embrión de la patria colombiana, llegando hacer un foco del desarrollo socio – económico y político que ha dado luz y gloria al pais, y después de sus restauración el ejemplo de sus grandeza y tesón, que aún conserva los rasgos coloniales, la cual fue rescatada de las ruinas, recobrando sus mas fervientes valores del espíritu, para mostrar su templanza, su amor y vigor, de su inmensa fe, resaltando una ciudad que es la esencia de nuestra historia.
Estamos en Semana Santa, donde es preciso escuchar los oídos del corazón, reflexión esta que trata sobre la necesidad de “ir y ver” para descubrir y poder contarla a partir de la experiencia de los acontecimientos y del encuentro con las personas. Siguiendo en esta linea, deseando centrar la atención sobre otro verbo, “escuchar”, decisivo en la gramática del dialogo y condición de una conversación autentica. Todo esto porque estamos perdiendo la capacidad de escuchar a quienes tenemos delante, sea en la trama normal de las relaciones cotidianas, sea en los debates sobre los temas mas importantes de la vida civil. Al mismo tiempo, la escucha esta experimentando un nuevo e importante desarrollo en el campo comunicativo e informativo, a través de las diversas ofertas de podcast y chat audio, lo que confirma que escuchar sigue siendo esencia para la comunicación humana; por esto es importante recordar sobre las luchas de la independencia que reservan al Cauca sus días más amargos y bellos; será el tiempo de su padecimiento y de su gloria, en su huerto la tiranía cosecha las cabezas de sus mejores hijos, y su pueblo el que rueda anónimo a la tumba, seda con gozo al sacrificio. Toda esta opulencia se acumula desde la colonia, ofreciendo la libertad, hoy en día plagado y azotado por grupos armados ilegales GAI, que agobian la existencia de campesinos, indígenas, mestizos y afrodescendientes. Digno de resaltar la expresión mas elocuente de Popayán y municipios aledaños, cuando se desarrolla la semana mayor. La fe y cultura son los dos atributos que magnifican el arte religioso de las procesiones, el festival de música religiosa y sus cantos gregorianos, enriqueciendo la vida semanasantera, conciertos estos que son populares y de grandes audiciones vocales y orquestales transportando al mundo la estampa de la leyenda. los monumentos, las exposiciones y el encanto de todas las cabeceras municipales, que a los poetas y compositores de música han inspirado.
Nuestro Cauca es un emporio de historia, cultura y belleza, convirtiéndose en la sorpresa, alegre de Colombia, ubicado en el suroccidente colombiano, posee una envidiable posición geográfica y unos aspectos ecológicos y antropológicos heterogéneos, el cual se extiende desde el litoral pacifico con sus islas Gorgona y Gorgonilla, hasta las nevadas cumbres del nudo andino. Su variedad natural va desde los cálidos manglares y selvas bajas del litoral, hasta las frías selvas andinas y paramos, también posee regiones secas, casi desérticas en el sur del valle del Patía, contrastando con la humedad de la selva tropical amazónica de la Bota Caucana. La extraordinaria riqueza climática permite la existencia de una fauna, altamente diversificada, especialmente en aves, mamíferos e insectos, además de una flora sobresaliente. Los aspectos antropológicos y arqueológicos tienen su mayor expresión entre comunidades indígenas de Guambia y Paez, los hipogeos de Tierradentro y las historias de municipios como Santander de Quilichao, Caloto, Miranda, Silvia, Popayán, Timbío, Bolivar, Almaguer, Mercaderes, entre otros, donde se pueden encontrar extraordinarios atractivos naturales, muchos de los cuales hoy en día, han sido protegidos en cuatro áreas de preservación o Parques Nacionales, como son; El Parque de Purace, el parque del nevado del Huila, el parque de Munchique, el parque de la Isla de Gorgona, los cuales ofrecen atractivos de singular belleza, dignos de conocer. Es el momento de que todos los que habitamos este lindo departamento, hagamos valer lo que tenemos y trabajemos para conseguir un mejor desarrollo que genere bienestar para todas las comunidades.
