Por Astrid Villa Doria
Inicié a escribir como terapia, luego me di cuenta que el escribir para mí, era más que el simple ejercicio de buscarle sentido a las letras, entonces fue cunado inicie a descubrir mi verdad interior, modelar mi mente y realidad, además de tener más claridad y organización mental y sobre todo a tener más tranquilidad y simpleza en mi vida
Pero lo más importante es que decidí hacerlo porque me di cuenta de que el futuro no está escrito, es un abanico de posibilidades y yo puedo escoger que clase de futuro deseo para mí. Esperar a que alguna persona lo haga es simplemente condicionarme a una sola opción.
Ahora creo que el camino a la espiritualidad, a la riqueza y a la felicidad está en una sola acción: el control de la mente. La mente es quien crea el miedo, quien nos limita y nos condiciona. Cuando logras salir de allí, comprender que eres la consciencia detrás de tus pensamientos, que tienes control sobre ellos es cuando entiendes quién eres de verdad y comienzas a manifestar tus verdaderos deseos.
Una de las formas que uso para sintonizarme con mi intuición, dejar de lado los problemas y enfocarme en la solución, es a través de mis ejercicios escribir. Allí me conecto conmigo misma, me doy permiso para soltar lo que debe irse y abrir espacio para lo que de verdad necesito para avanzar.
No necesitas de rituales complejos o de oraciones complicadas para salir de un estado emocional que te bloquea, no necesitas de alguien que te diga que tienes que hacer. Las respuestas están en ti y debes comenzar sacarlas y despertarlas. A través de ejercicios de la escritura terapéutica puedes hacerlo, hoy día doy conferencias y dicto talleres para guiar a las personas a lograrlo.
En mi ejercicio de escritura diario, por ejemplo, me pregunté qué sería de mi si no hubiese hecho este enorme trabajo mí.
Seguiría siendo una empleada que mantiene un horario y cargas ajenas en vez de una emprendedora independiente y libre de horarios.
Seguiría siendo una mujer temerosa, intranquila e irritable en vez de una mujer feliz, sonriente y tranquila.
Seguiría haciendo lo que lo demás me dicen que debería hacer en vez de seguir los deseos de mi alma.
Seguiría dudando de que todo puede salir bien en mi vida en vez de confiar y dar el siguiente paso con fe.
Seguiría perdiendo mi tiempo viendo series, en vez de observarme más a mí misma.
Seguiría teniendo miedo a perder un trabajo en vez de confiar en poder creador de abundancia.
Porque el cambio no está afuera. Ocurre en el interior y se refleja en lo que haces y tienes.
Porque es bueno escribir tus pensamientos
Como ya te explicaba, escribir mis pensamientos ha transformado mi vida por completo. Ahora voy a darte algunas razones por las cuales tu deberías comenzar un diario de escritura personal:
Crear conciencia e intencionalidad sobre lo que piensas y haces.
Para enfocarte en lo que quieres lograr, no solo con tus metas, sino con la base de tus objetivos: tus creencias.
Para observarte a ti mismo de manera objetiva. Recuerda que no eres tus pensamientos, eres la CONSCIENCIA detrás de tus pensamientos.
Transformar tus creencias limitantes. Escribir te ayuda a ver que estás pensando y a la vez a transformar tu mente por repetición y activación nerviosa.
Conectar con tu corazón y tu intuición. Tu verdadera sabiduría no es mental, no es una acumulación de información. Es tu conexión con la sabiduría interior de tu subconsciente.
Limpia tu contaminación mental y te ayuda a sacar las ideas que bloquean. Es un trabajo de «higiene mental», así como limpias tu cuerpo diariamente, deberías hacerlo con tu mente.
Te da claridad mental y te ayuda a organizar tu mente.
Te ayuda a llevar un registro de tu progreso y crecimiento personal.
