El municipio de Jamundí, situado al sur de Cali, ha sufrido al menos 17 ataques de grupos armados entre diciembre de 2022 y junio de 2024, generando preocupación por la seguridad. Dos recientes explosiones, incluyendo una moto bomba cerca de una entidad bancaria y hostigamientos en la vereda Potrerito, dejaron seis heridos graves. Estos actos se suman a una serie de agresiones atribuidas al Estado Mayor Central, liderado por Iván Mordisco.
POR: REDACCIÓN EL NUEVO LIBERAL
El municipio de Jamundí, ubicado a 24,1 kilómetros al sur de Cali, ha sido blanco de al menos 17 ataques por parte de grupos armados entre el 21 de diciembre de 2022 y el 12 de junio de 2024. Esta serie de ofensivas ha generado una creciente preocupación por la seguridad en la región.
Los dos incidentes más recientes ocurrieron el miércoles 12 de junio de 2024. En la mañana, una moto bomba explotó en el centro del municipio, cerca de una entidad bancaria. La detonación, que ocurrió a las 6:50 a.m., dejó seis personas heridas, entre ellas dos policías y un civil en estado grave. El segundo ataque tuvo lugar en la vereda Potrerito, donde combatientes hostigaron a la Policía, obligando a unos 500 estudiantes de una institución educativa a refugiarse en un coliseo local.
Cinco días antes, el 7 de junio de 2024, un carro bomba explotó contra la Fuerza Pública en el corregimiento de Robles, también parte de Jamundí. Estos ataques recientes son parte de una serie de agresiones que han mantenido a la comunidad en un estado de alerta constante.
Los ataques contra Jamundí comenzaron el 21 de diciembre de 2022. Ese día se registraron dos atentados, incluyendo uno con un carro bomba en la vía que conecta la cabecera urbana del municipio con la zona de Potrerito. Después de casi seis meses de relativa tranquilidad, la violencia resurgió el 19 y 20 de julio de 2023, cuando se reportaron tres ataques con granadas y explosivos en una gasolinera y en los barrios El Portal de Jordán y Anturios, dejando 10 personas heridas.
Los recientes ataques han sido atribuidos al Estado Mayor Central, comandado por Iván Mordisco. La ofensiva de este grupo ha convertido a Jamundí en un foco de violencia en el Valle del Cauca, exacerbando las tensiones y la inseguridad en el área.
La escalada de violencia ha tenido un impacto devastador en la comunidad de Jamundí. Los continuos ataques han sembrado el miedo entre los residentes, afectando la vida cotidiana y obligando a las instituciones educativas y comerciales a tomar medidas extremas de seguridad. La población vive en constante temor ante la posibilidad de nuevos ataques.
La situación en Jamundí es un claro reflejo de los desafíos que enfrenta la región en términos de seguridad y paz. La comunidad y las autoridades locales se encuentran en una lucha constante para proteger a los ciudadanos y restaurar la tranquilidad en un municipio que ha sido severamente afectado por la violencia armada. La necesidad de una respuesta efectiva y coordinada por parte del gobierno es más urgente que nunca para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes de Jamundí.
Foto El Colombiano
