Por: Mg. Juan Camilo López Martínez
Nuevamente, semana tras semana, la situación del Cauca y la vía panamericana se volvió reiterativa: bloqueo en la vía panamericana. En lo corrido del año 2024, se registran aproximadamente 30 bloqueos de la vía, es decir, que en promedio no hay una semana del año en la cual esta importante vía no se encuentre cerrada.
Al respecto, me parece importante poner en mención que, desde mi perspectiva, es absolutamente inviable un departamento en el cual su capital queda desconectada del resto del departamento y país, por reclamos que van desde deudas históricas con las comunidades, hasta insignificantes situaciones que de seguro se podrían resolver con un par de llamadas. Es inviable, porque las consecuencias económicas son fatales y la generación de condiciones para el crecimiento económico desaparecen por completo, pues cualquier tipo de inversión en el departamento tiene un riesgo que pocos estarían dispuestos a asumir.
Dicho esto, el mensaje es uno y sin duda, es el que predomina en la ciudadanía del departamento del Cauca: Paren los bloqueos ya. No obstante dicha esta generalidad, es importante dejar plasmadas tres reflexiones sociales y políticas alrededor del tema:
La primera, es que el problema no eran los gobiernos nacionales de turno en ocasiones anteriores, pues si hay un gobierno nacional que cuenta con el respaldo de las organizaciones indígenas (generadoras de muchos bloqueos), es el gobierno nacional actual y esta problemática no ha parado y por el contrario, se ha intensificado.
La segunda, es que a partir de la primera premisa, quienes deben enfrentar y asumir esta situación es el gobierno nacional, pues además de legitimidad ante las organizaciones sociales, tienen recursos humanos y financieros, es decir, tiene todo lo necesario para tomar decisiones de políticas que solucionen este problema.
La tercera, es que necesitamos que los mandatarios locales y regionales exijan y comuniquen con claridad que el gobierno nacional debe responder a esta problemática. Es momento de decir menos que necesitamos un GRAN ACUERDO y decir más, tenemos un plan de acción, el cual le corresponde en mayor porcentaje al gobierno nacional.
Finalmente, es momento de exigir, pues el Cauca, su economía y los sueños de muchas personas que aquí residimos, no pueden verse afectados por unos pocos que tienen causas justas, pero que también tienen los mecanismos institucionales para empezar a solventar los problemas y las reivindicaciones. Que el gobierno nacional, empiece a solucionar con la legitimidad, los recursos humanos y los recursos económicos que tiene, genere valor público y por supuesto, que paren los bloqueos ya.
