Reunión extraordinaria del CRIC en Defensa de los Derechos Humanos ante crisis en el Cauca, especialmente en sus resguardos indígenas, para tomar medidas y evitar más muertes de líderes, lideresas y comuneros en los territorios.
Por REDACCIÓN EL NUEVO LIBERAL
La Consejería Mayor del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) convocó a una reunión extraordinaria de la junta directiva en defensa de los derechos humanos, ante la crisis humanitaria que afecta a los territorios de Toribio, Tacueyó y San Francisco en el departamento del Cauca. Los ataques perpetrados por integrantes del estado mayor central de las disidencias de las FARC EP, estructura Dagoberto Ramos, dejaron una mujer muerta y dos comuneros heridos. Además, de los ataques que perpetraron a la caravana del funeral de la mayora Carmelina Yule. Tomar medidas para evitar más muertes de líderes, lideresas y comuneros en los territorios.
La reunión fue programada para el día de ayer 20 de marzo en el corregimiento El Pital, municipio de Caldono, contó con la participación de autoridades indígenas, presidentes o consejeros de las asociaciones de cabildos, así como gobernadores del cabildo mayor Yanacona y del pueblo Totoroez.
La convocatoria expresó una honda preocupación por los recientes actos de violencia, calificándolos como “duros, dolorosos e indignantes” y señalando el recrudecimiento del etnocidio que afecta a las comunidades indígenas del departamento del Cauca. Se hace hincapié en la necesidad de tomar decisiones que garanticen el bienestar de estas comunidades.
Se espera que la reunión haya arrojado conclusiones importantes y acciones concretas para hacer frente a la situación de violencia que amenaza la tranquilidad y la pervivencia de las comunidades indígenas en la región.
