Durante tres días consecutivos, el director general de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Felipe Harman estableció escenarios de diálogo con comunidades campesinas y étnicas para abordar conflictos territoriales históricos con visitas sin precedentes a los municipios de Inzá, Popayán y Santander de Quilichao
Por REDACCIÓN EL NUEVO LIBERAL
Durante tres días consecutivos, el director general de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Felipe Harman, llevó a cabo una visita sin precedentes a los municipios de Inzá, Popayán y Santander de Quilichao en el departamento del Cauca. Su objetivo principal fue establecer escenarios de diálogo con comunidades campesinas y étnicas para abordar conflictos territoriales históricos y avanzar en la adquisición y entrega de predios a campesinos, afrodescendientes e indígenas por parte de la Agencia.
Uno de los hechos más significativos de esta jornada fue la firma de una resolución que otorga el título colectivo al Consejo Comunitario Monte Oscuro, ubicado entre Puerto Tejada y Candelaria. Esta acción no solo representa un avance tangible en la reforma agraria, sino que también es un homenaje al líder afro Weimar Possu Díaz, presidente del consejo comunitario, quien fue lamentablemente asesinado en marzo de 2023.
Además, se llegó a un acuerdo importante sobre la finca El Convenio, en Totoró, la cual será entregada equitativamente a campesinos y al pueblo Polindara, fortaleciendo así la cohesión y el desarrollo comunitario en la región.
Harman destacó la importancia del diálogo como herramienta fundamental para resolver problemas interculturales y revalidó el compromiso de la Agencia con los pactos territoriales y la reforma agraria en el Cauca. Durante las reuniones con las comunidades, se revisaron compromisos previos en cuanto a la adquisición y entrega de tierras, abordando conflictos específicos y llegando a acuerdos concretos que reflejan el compromiso del Gobierno con el diálogo y el bienestar de las comunidades locales.
Esta negociación histórica representa un paso significativo hacia la construcción de una paz territorial duradera y el fortalecimiento del tejido social en el Cauca. La voluntad política y el compromiso con el diálogo demuestran que es posible encontrar soluciones pacíficas a los conflictos territoriales, garantizando así el desarrollo sostenible y la inclusión de todas las comunidades en el proceso de transformación del país.
Después de más de una década de conflicto territorial entre el pueblo indígena de Polindara y la Asociación Campesina de Totoró por el predio El Convenio, ubicado en la vereda La Siberia del municipio de Totoró, finalmente se ha logrado un acuerdo histórico. Tras la visita del director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), se ratificó el compromiso de entregar esta finca a ambas comunidades por partes iguales.
William Sánchez, gobernador del pueblo Polindara y miembro del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), expresó su gratitud por el acuerdo alcanzado: “La verdad es gratificante el acuerdo que se realiza. Hoy se concreta y se avanza ya casi en la entrega a cada una de las comunidades. Existe voluntad por parte de la asociación campesina y de parte del pueblo indígena Polindara. La verdad es muy grato que vamos avanzando a entregarle la tierra a nuestros comuneros”.
Por su parte, Jhonier Caldono, presidente de la Asociación Campesina del Municipio de Totoró, señaló la importancia del acuerdo para la visibilización de los campesinos: “Miramos con buenos ojos que el director haya dado esa facilidad para que nosotros los campesinos dejemos de ser invisibilizados. El hecho de que esta finca El Convenio se dé para la organización campesina nos abre muchas puertas”.
Este avance significativo fue posible gracias a espacios de diálogo que contaron con la participación de diversas organizaciones, entre ellas el CRIC, la Asociación de Cabildos Indígenas del Cauca (ACIN), la Asociación de Consejos Comunitarios del Norte del Cauca (Aconc), el Comité de Integración del Macizo Colombiano (CIMA), la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC), la Federación Nacional Sindical Unitaria Agropecuaria (Fensuagro) y el Proceso de Unidad Popular del Sur Occidente Colombiano (PUPSOC).
Este acuerdo ejemplifica el poder del diálogo y la cooperación para resolver conflictos territoriales en el Cauca, allanando el camino hacia una convivencia pacífica y equitativa entre las comunidades indígenas y campesinas en la región.
